Por: Lincoln Minaya - 04/06/2025
Tenares, provincia Hermanas Mirabal. — Como hijo de este pueblo y testigo del esfuerzo diario de nuestros jóvenes atletas, me veo en la obligación —y en el deber— de alzar la voz. El deporte en Tenares está siendo asfixiado por el abandono institucional. Las instalaciones deportivas que alguna vez fueron símbolo de esperanza y desarrollo hoy yacen en ruinas, olvidadas por quienes deberían velar por su mantenimiento y uso adecuado.
He caminado muchas veces por el deteriorado Multiuso Deportivo Manuel Osiris Hidalgo López. El mismo fue inaugurado con bombos y platillos en 2020, y nos llenó de ilusión. Allí se practicarían hasta siete disciplinas deportivas. Pero esa alegría duró poco. La falta de vigilancia y mantenimiento convirtió ese recinto en un almacén desolado. La irresponsabilidad de la pasada gestión del Ministerio de Deportes y de la alcaldía local permitió que se robaran los aros, las puertas, hasta los baños. Verlo en su estado actual duele en el alma. Y como dice una expresión popular: “Lo que nada cuesta, hagámosle fiesta”.
El caso del Polideportivo William Gilbert no es distinto. Funciona a duras penas gracias al esfuerzo titánico del Movimiento Deportivo Tenares y del patronato que, con las uñas, lo mantienen a flote. Ni hablar del Play Luis Paula y otros estadios de béisbol que claman por personal técnico, mantenimiento y, lo más básico, utilería deportiva.
La Dirección Provincial de Deportes parece haber borrado a Tenares de su lista de prioridades. ¿La última vez que enviaron una bola? Ni siquiera lo recordamos. Lo poco que tenemos ha llegado por donaciones de tenarenses en el exterior que, a pesar de la distancia, no se olvidan de su pueblo.
Es inaceptable que figuras comprometidas como Francisco Valentín (Chanchy), el más carismático dirigente deportivo de la provincia, haya sido desvinculado como director del INEFI en el municipio, en una maniobra de incapacidad política y poca visión deportiva. Para nadie es un secreto que Francisco Valentín (Chanchy) no es político, sino un trabajador del deporte a tiempo completo. Su entrega al Movimiento Deportivo Tenares ha sido inquebrantable, a pesar de las trabas.
Hace poco, se entregó un levantamiento al ministro de Deportes, Kelvin Cruz. Un documento claro, con evidencias del deterioro y propuestas para cambiar el rumbo. Aún no hemos recibido respuesta, pero mantenemos viva una chispa de esperanza. Porque este llamado no es solo una denuncia, es una invitación a construir juntos, a trabajar por el deporte y la juventud tenarense.
Desde nuestro municipio, pedimos al Ministerio de Deportes que escuche. Que actúe. Que entienda que, detrás de cada cancha rota, hay un niño que no puede entrenar adecuadamente. Que, por cada aro robado, se pierde una oportunidad de formar valores, disciplina y ciudadanía.
Tenares no pide privilegios. Exige justicia deportiva. Gobierno y comunidad deben unirse por el presente y el futuro de nuestros jóvenes.
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