1,254,388 profesionales, técnicos y trabajadores independientes (TI) esperan ser afiliados al Régimen Contributivo Subsidiado (RCS), ya que generan ingresos iguales o superiores al salario mínimo nacional (SMN). Incluyendo a sus dependientes, totalizan 2,959,654 personas, el 27% de la población nacional.

Según la encuesta del Banco Central, a octubre del 2013, el llamado “sector informal” representa el 57% de la población económicamente activa (PEA), creando tres de cada cuatro nuevos empleos. Los trabajadores por cuenta propia constituyen el 70% de este contingente laboral mayoritario.

Pero, a pesar de su peso específico, y del mandato de la Ley 87-01, así como de varias resoluciones del CNSS, y de proyectos pilotos aprobados, el RCS ya tiene 8 años de retraso. Y todo indica que continuará en el limbo un año más, ya que en el Presupuesto del 2014 no se visualiza una partida para su inicio.

En el 2011 la SIPEN, con visión de futuro y en cumplimiento de la Ley 87-01, llamó a un concurso para analizar y cuantificar a los TI y redactar el Reglamento del RCS, siendo el adjudicatario. 8 meses de intensa labor analítica me permitieron conocer a fondo su situación, estimar su cantidad y nivel de ingreso. A partir de esta realidad diseñé modalidades no convencionales de afiliación, cotización y recaudo, acordes con sus características laborales y económicas.

Los TI generan ingresos equivalentes al 17.3% del PIB

Basado en la información de dicha Encuesta, se estima que en el 2013 el ingreso de los TI que corresponden al RCS ascendió a 374,634.5 millones de pesos, el 16.7% del PIB, con un promedio mensual de 25,549.10. Estos datos, por sí solos, justifican la creación del Régimen Contributivo Subsidiado (RCS) ya que los trabajadores por cuenta propia no califican para el Subsidiado porque tienen capacidad contributiva, ni tampoco para el Contributivo, debido a la ausencia de un empleador solidario.

Con frecuencia a los TI se les agrupa y estigmatiza como informales señalando que “no pagan impuestos”, lo que no responde a la realidad. Se estima que su contribución al fisco equivale al 10.7% de los ingresos tributarios: un 5.5% como compradores de insumos intermedios (combustibles, materias primas, piezas, repuestos, entre otros);  un 4.1% como consumidores finales de bienes y servicios grabados con el ITEBIS; un 0.5% deducidos de consultorías y transacciones bancarias, y un 0.6% por el pago de impuestos vehicular e inmobiliario.En adición, el 86% de los TI percibe ingresos promedio por debajo del salario mensual exento del impuesto sobre la renta.

Tres características laborales diferentes a los asalariados

Además de carecer de un empleador solidario, los trabajadores independientes presentan tres características laborales específicas, que los diferencian de los asalariados: 1) realizan actividades predominantemente unipersonales; 2) no llevan nómina ni contabilidad organizada; y 3) carecen de un patrón que calcule los aportes y pague a la Tesorería de la Seguridad Social (TSS).

Estas características difieren y contrastan sustancialmente con las premisas, esquemas y soluciones de los seguros sociales tradicionales. En consecuencia, el gran reto para garantizar la funcionalidad del Régimen Contributivo Subsidiado, es diseñar modalidades de afiliación, cotización, recaudo y pago de acuerdo a las particularidades de los trabajadores independientes. Continuará.